Hay un punto en tu vida, en el que te das cuenta: quién importa, quién nunca importó, quién no importa más, y quién siempre importará. De modo que no te preocupes por la gente de tu pasado , hay una razón por la que no estarán en tu futuro.


martes, 29 de noviembre de 2011

30 Seconds para alucinar

Muy complicado realizar una crónica del concierto ofrecido por 30 Seconds To Mars en Frankfurt con motivo de la gira de Closer to the Edge.

Por un lado los fans acérrimos, quienes verán todo lo positivo que tuvo el concierto, pero, por otro, habrá quienes siendo realistas y con el corazón en la mano se mojen y digan lo que allí aconteció.
Yo me mojo, quizás hasta que me ahogue, pero no puedo pasar por alto el bochornoso concierto ofrecido por Jared Leto y los suyos.



Si volvemos a los fans, quienes en su mayoría abarrotaron el aforo y gritaban como si se les fuese la vida en ello, hicieron cola durante horas para tener una buena visibilidad frente al escenario y se dejaron la paga del mes ( la entrada más barata 45 euros ).

En lo musical, poquita cosa, por no decir nada. Sí es cierto que el montaje fue espectacular, la entrega fue máxima de principio a fin y el sonido estuvo a la altura de las circunstancias. El inicio, épico como pocos, estuvo marcado por los dos primeros cortes que hacen lo propio en su citada nueva referencia, ‘Is a Beatiful life’ y ‘Night Of The Hunter’. A partir de ahí un compendio de canciones como ‘Attack’, ‘This Is War’, ‘100 Suns’, ‘Closer To The Edge’ y ‘L490’ que hicieron las delicias de un respetable que se entregó en cuerpo y alma tanto o más que los músicos sobre el Stage. Pero yo estaba atónita, por un momento pensé que me enfrentaba a una broma de muy mal gusto, pero no, el frontman de la banda ejerció a la perfección como tal, sin embargo, no estuvo a la altura de las circunstancias como cantante. Todas, repito, todas las canciones las empezaba pero ninguna las finalizaba, dejando la mayor parte de las letras sin cantar, siendo coreadas por el público casi en su totalidad. Mientras, Jared se aferraba a lo alto de las plataformas situadas al borde del escenario, daba vueltas al pie del micrófono cual animal afectado de un síndrome vestibular, arengaba a las masas con sus coreos y levantaba los brazos cual hooligan cargado de alcohol. Y reseñar el constante “jump, jump, jump” al que animaba una canción tras otra, donde repitió infinidad de veces lo maravilloso que era el público y agradecía por todo a Frankfurt.

Como político, Jared tendría futuro por sus discursos sin fundamento, si bien, este actor reconvertido en frontman, que no cantante pues no cantó nada, hizo bien su papel y lo jugó a la perfección. Siendo ídolo de masas, las supo mover, controlar y animar a su antojo, destacando el instante que cogió su acústica e intentó cantar, momento que tampoco lo hizo y volvió a tirar, nuevamente, del apoyo vocal de los presentes en el foso y las gradas.

Y el cierre, los más desconcertante que yo he visto, Jared & Company se permitieron el lujo de poner íntegramente el Video Clip de "Hurricane " video clip que dura aproximadamente 8 minutos y se marcharon del escenario, sin entonar otra vez, ni una sola estrofa, ( os juro que yo no daba crédito a lo que estaba aconteciendo allí ). Luego reanudó con el tema "Kings and Queens’, momento en que Jared hizo subir a unas treintena de personas del público, para terminar de rematar el bochornoso espectáculo.





Y ahora y por poner algo de positivo en todo esto y para que entendáis porque yo fui a ver a estos chicos a Frankfurt os dejo un Unplugged, donde realmente enamoran y cantan, algo que desgraciadamente olvidaron hacer en Frankfurt.