Hay un punto en tu vida, en el que te das cuenta: quién importa, quién nunca importó, quién no importa más, y quién siempre importará. De modo que no te preocupes por la gente de tu pasado , hay una razón por la que no estarán en tu futuro.


martes, 5 de junio de 2012

La letra con sangre entra

Ayer me tatué.. si!!

A veces intento de embellecer el cuerpo y otras de cargarlo de discurso, siempre fue y en este momento es, un gesto unívoco. Incluso en los negros azulados de un tatuaje carcelario estamos presenciando el impulso humano a volver lo cotidiano compromiso mágico. El tatuaje nos compromete no sólo con la figura tatuada sino con el tiempo que esa figura evidencia.

He leído por ahí, que con el tatuaje una persona quiere decir algo más de él y resaltar esa parte del cuerpo dónde se lo hace. Bueno yo estoy completamente de acuerdo con la primera parte, es decir, con lo de que la persona quiere decir algo más de él, el tema de resaltar la parte del cuerpo, para mi ha sido simplemente estética.

Todas las personas atravesamos diferentes crisis durante nuestras vidas. Pero existe un tejido social que es menos consistente y menos continente y hay menos canales para registrar esas crisis. Por eso cada persona tatuada transmite sus propias experiencias a través de un medio más tangible y modificable: el propio cuerpo.

Eso es justo lo que he hecho yo, expresarme a través de mi cuerpo, habrá personas que lo entiendan y otras que no, pero bajo mi punto de vista el tatuaje viene a reparar algún aspecto que uno considera faltante en uno mismo. Puede servir para compensar situaciones de pérdida, ya sea de un ser querido o de ideales, o de aspiraciones no cumplidas. Puede ser un medio para regular tensiones internas y para expresar afectos y deseos de perdurabilidad.




PD: El Tatuaje : Actuación que se convierte en una paradoja. Dice y no dice desde lo simbólico ya que lo vivido no puede ser expresada totalmente a través de la palabra. El sentir está ausente. Al evocar lo vivido, mi voz refleja dolor. Representación y afecto no marchan juntos. Algo del trauma asoma y nombra a través de la actuación que me implicara el tatuarme, pero deja adentro el recuerdo del dolor.